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This morning the Biden administration announced imminent plans to restart the Migrant Protection Protocols (MPP), a Trump-era policy that forced people seeking asylum to await their U.S. immigration court dates in perilous conditions in Mexico. Reports suggest MPP processing will resume as soon as next Monday. The Center for Gender & Refugee Studies (CGRS) and our colleagues have implored the Biden administration to prevent the return of MPP since a federal court injunction ordered the program’s resumption back in August. We are alarmed that the Biden administration is not only restarting MPP, but also expanding the policy’s reach even beyond its original iteration under Trump.
The Biden administration has pledged to make “humanitarian improvements” to MPP, including the right to legal counsel and a promise to resolve MPP cases more quickly. But as Department of Homeland Security Secretary Alejandro Mayorkas himself has acknowledged, MPP’s severe flaws are “endemic” and fundamental to its design. Every day a person seeking asylum is forced to “remain in Mexico” puts them at risk of violence at the hands of cartels and other actors, including Mexican law enforcement, that routinely prey on migrants. And it is simply not possible for people trapped in Mexico to access U.S. immigration attorneys who can support them throughout the difficult process of preparing an asylum case.
The administration’s promises of humanitarian exemptions for “particularly vulnerable individuals” and screening for those who fear harm in Mexico also provide little comfort. Every person seeking asylum has survived severe hardship and is highly vulnerable to harm or death in Mexico. The administration's screening process to identify those who should be exempted from MPP does not provide adequate safeguards and imposes a higher standard than required in other summary procedures, which will be extremely difficult for any asylum seeker to meet. Moreover, the Biden administration has inexplicably chosen to expand the application of MPP to populations who were not subject to the policy even under Trump. Under Biden’s MPP 2.0, people fleeing countries in the Western Hemisphere who do not speak Spanish will be trapped in Mexico, too. This will put Black Haitian and Jamaican asylum seekers, among others, at grave risk.
“The Remain in Mexico program was a human rights catastrophe that trapped people seeking safety in an ecosystem of violence and terror,” CGRS Legal Director Blaine Bookey, who has been counsel in multiple lawsuits challenging the legality of MPP, said today. “The policy was designed to punish and deter people seeking safety and deprive them of their rights. It is impossible to implement MPP in a way that keeps refugees safe and comports with our laws. We will continue to fight for a permanent end to MPP and all policies that place asylum seekers in harm’s way. It is long past time to restore access to a safe and fair asylum process at the border.”
“President Biden continues to promise a fair and humane asylum system, but the reality on the ground nearly one year into his first term tells a very different story,” CGRS Director Karen Musalo added. “For 10 months the administration has used the pandemic as cover to expel people seeking asylum to danger, ignoring objections by public health experts, human rights leaders, and its own legal advisors. Now the administration is hiding behind a court order to revive and expand a policy that has caused untold suffering at our nation’s doorstep. A more robust MPP, coupled with escalating Title 42 expulsions, will cement the Biden administration’s illegal border closure and leave a lasting stain on the president’s legacy.”
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CGRS denuncia el reinicio y expansión de la peligrosa política “Quédate en México”
2 de diciembre de 2021 – Esta mañana el gobierno Biden anunció sus planes inminentes de reiniciar los “Protocolos de Protección a Migrantes” (MPP, por sus siglas en inglés), una política de la era Trump que forzó a personas que buscan asilo a permanecer en México bajo condiciones peligrosas mientras esperaban sus citas para asistir a las cortes de inmigración en Estados Unidos. Reportes sugieren que MPP reiniciará tan pronto como el próximo lunes. El Centro de Estudios de Género y Refugiados (CGRS, por sus siglas en inglés) y muchas otras organizaciones imploraron a la administración Biden a que hiciera todo lo posible para prevenir el retorno de MPP luego de que una corte federal ordenará su reinicio el pasado mes de agosto. Nos alarma que el gobierno Biden no solo planee reiniciar MPP, sino que también busque expandir el alcance de la política más allá de la versión original creada bajo Trump.
El gobierno Biden se ha comprometido a realizar “mejoras humanitarias” a MPP, incluyendo el derecho a representación legal y la promesa de resolver casos prontamente. Pero como el mismo Secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas reconoció, las falencias de MPP son “endémicas” y parte fundamental de su diseño. Cada día que una persona solicitante de asilo es forzada a “permanecer en México” se le pone en riesgo de sufrir violencia a manos de carteles u otros actores, incluyendo las fuerzas de seguridad mexicanas, quienes con frecuencia victimizan a personas migrantes. Además, es simplemente imposible que las personas atrapadas en México puedan acceder a abogados de inmigración en Estados Unidos de manera que puedan recibir el apoyo que necesitan durante el difícil proceso de preparación de un caso de asilo.
Las promesas realizadas por el gobierno sobre exenciones para “individuos particularmente vulnerables” y evaluaciones para quienes tienen temor de regresar a México, no son fuente de esperanza. Cada persona solicitante de asilo ha sobrevivido dificultades extremas y es vulnerable a sufrir daños o perder su vida en México. El proceso de evaluaciones para identificar a quienes deben ser exentos de la política no proporciona salvaguardas suficientes y obliga a las personas solicitantes de asilo a alcanzar estándares más altos que los utilizados en otros procedimientos. Más aun, sin ofrecer ningún tipo de explicación, el gobierno Biden decidió expandir el programa para cubrir a poblaciones de migrantes que no se vieron sujetas a la política bajo Trump. Bajo el MPP 2.0 de Biden, las personas que huyen de la persecución de cualquier país del hemisferio occidental, sin importar si hablan español o no, se verán atrapadas en México también. Esto pone a migrantes de raza negra de países como Haití y Jamaica, entre otros, en gran riesgo.
“El programa Quédate en México fue una catástrofe de derechos humanos que atrapó a personas que buscan protección en un ecosistema de violencia y terror”, dijo la directora legal de CGRS, Blaine Bookey, quien ha sido abogada litigante en múltiples demandas en contra de MPP. “La política fue diseñada para castigar, disuadir y privar de sus derechos a las personas que buscan protección. Es imposible implementar MPP y al tiempo cumplir con nuestras leyes y proteger a las personas refugiadas. Continuaremos la lucha para acabar permanente con MPP y otras políticas que ponen a las personas solicitantes de asilo en peligro. Es tiempo de restaurar el acceso a un sistema de asilo justo y seguro en nuestra frontera.”
“El presidente Biden continúa prometiendo un sistema de asilo justo y humano, pero lo cierto es que a casi un año del inicio de su mandato sus acciones nos muestran una realidad diferente”, agregó Karen Musalo, directora de CGRS. “Por los últimos 10 meses el gobierno ha utilizado la pandemia como pretexto para expulsar a personas solicitantes de asilo de regreso al peligro, ignorando las objeciones de expertos en salud pública, la comunidad de derechos humanos, y sus propios asesores legales. Ahora el gobierno se esconde tras una orden judicial para revivir y expandir una política que ha causado horrores y sufrimiento en las puertas de nuestra nación. Este MPP más robusto, sumado a las expulsiones del Título 42, cimentará el cierre ilegal de la frontera de la administración Biden y dejará una mancha duradera en el legado del presidente”.